martes, 7 de diciembre de 2010

El trópico de los tejados - JUAN PEDRO FERNÁNDEZ BLANCO

Entonces dudo,
dudo de la sangre,
dudo del poder,
dudo del azogue,
dudo,
y esa duda me disuelve
en una condición de cuerpo translúcido
permeable y escasamente denso,
un cuerpo al que la duda azota
con su peste más selecta,
con su cohorte de grises y medios tonos,
con la incertidumbre como bandera
y una artrítica resistencia a lo infalible,
a lo predecible, a lo resuelto.
Puedo afirmar que al no ser
de una composición nada exacta
mi estado me permite adentrarme
en la cotidianidad más fronteriza,
y compro resuelto el periódico,
tiro y aplasto en el suelo la colilla del día completo,
mientras paseo a mi cooker por el camposanto,
e insulto a las viejas por su certero olor a pis y naftalina,
me meo en un banco trazando la cuadratura del circulo,
y frente al ajedrez
someto a los clérigos al dictamen de mi alfil,
es
    un intento matizar mi gama de neutros,
donde me pierdo en una suerte
de azahar falible e impreciso
cuestión, además de inoportuna, cargada de inseguridad.
Si por entonces me topo con el amor sincero,
no lo acepto, lo destruyo,
y una vez muerto,
¡grito! y ¡grito!,
escucho, en el eco, caracolas, estrellas de mar, caballitos...
aquellos momentos que al despertar no arrasó el sueño.
Ya que no siento la consistencia del cuerpo,
ante una bacanal de dudas,
suelo elevarme al trópico de los tejados,
un paraíso tan dispar no puede ser mejor posada.
Veo a un gato pasear su runrún por la sobra de las ventanas,
lejanas estrellas juegan al escondite en una triste bóveda de humo,
paseo teja a teja, subiendo en escalera hasta lo más imperfecto del tejado.

(Poema inédito)




JUAN PEDRO FERNÁNDEZ BLANCO es uno de los autores del libro colectivo LA REPÚBLICA DE LA IMAGINACIÓN, en el que parcitipa con su poemario Suspira, amor, suspira.

1 comentario:

Alejandra dijo...

Bonito poema, Juan Pedro: sin dudas.